1.- Mantener las horas de comer y el tipo de comida al que estamos acostumbrados, a no ser que nos encontremos en una situación que nos lo impida.
2.- Nuestro estado de ánimo y de la memoria son muy importantes para asegurar que seguimos
las recomendaciones dietéticas. ¡Si no estamos seguros de algo, mejor dejarnos aconsejar!
3.- Es muy bueno buscar compañía para comer. Comer en solitario nos puede llevar a comer desequilibradamente.
5.- Controlar el sobrepeso nos facilitará movernos con más agilidad.
6.-Debemos procurar hacer comidas de fácil digestión.
7.- Beber es tan importante como comer: conviene tener agua o zumos siempre a mano.
8.- Mantener la dentadura limpia y bien ajustada, para evitar problemas al masticar y tragar.
9.- Luchar contra el insomnio: se debe combatir con la actividad física y buscando ocupaciones y distracciones durante el día.
10.- Una buena preparación y presentación de los platos abre el apetito.