Partir del concepto de que nuestro organismo es como un lugar sagrado que debemos cuidar y mantener limpio resulta un sano consejo el que nos preocupemos por lo que ingerimos e invitamos a que forme parte de nosotros. La función de la comida debe limitarse a la nutrición de las células, la recomposición de los tejidos y la activación de la energía. Una alimentación liviana, es decir, que se digiere fácilmente, es más recomendable que las comidas pesadas y con abundancia de aditivos y condimentos, ya que favorece la calma y concentración de la mente.
Gracias a innumerables estudios se ha comprobado que no sólo podemos obtener los nutrientes necesarios para nuestro organismo con una dieta que incluye estrictamente productos de origen animal si no que podemos alimentarnos correctamente y de una forma muy balanceada a partir de productos de origen vegetal y eso ya es un alivio para todos los que respetan la vida.
A continuación te ofrecemos un recopilación las tendencias en la alimentación de origen vegetal para que tengas una idea de que son y puedas ir quitándote la idea errónea de que sólo podemos alimentarnos correctamente cuando incluimos productos provenientes de los animales:
Vegetariano: es el término que engloba a todas las personas que en sus dietas no incluyen carnes de ningún tipo. La palabra vegetariano (vegetarian en inglés) fue acuñada por los fundadores de la Asociación Vegetariana Británica en el año 1842, y deriva de la palabra latina vegetus, que significa “completo, sano, fresco o vivaz”. El significado original de esta palabra implica un equilibrado sentido filosófico y moral de la vida, que va mucho más lejos de una mera dieta de verduras y frutas.
El vegetarianismo es un paso esencial en pos de una sociedad mejor, y se refiere a la práctica alimentaria que evita la ingestión de todo tipo de carnes de origen animal. Es interesante conocer las diferentes variantes que está palabra contiene y que podríamos clasificar del siguiente modo:
Lacto vegetarianismo: son los vegetarianos que no consumen carnes o huevos, pero sí consumen productos lácteos. La mayoría de vegetarianos de la India y aquellos provenientes del Mediterráneo (como los pitagóricos), son en efecto lacto vegetarianos.
Ovo lacto vegetarianismo: los practicantes de esta corriente consumen huevos y productos lácteos, pero no carne ni peces. Esta es la variación más común en la Cultura Occidental.
Ovo vegetarianismo: quienes practican esta tendencia son aquellos que no comen carnes o productos lácteos, pero sí huevos.
Api vegetarianismo: son quienes consumen miel. El prefijo api- también puede ser empleado en las demás definiciones, por ejemplo: api-ovo-lacto vegetarianismo, api-ovo vegetarianismo, api-lacto vegetarianismo.
Vegetarianos Veganos: son aquellos que no consumen ningún alimento de origen animal, rechazando por tanto el consumo de huevos, lácteos y miel, también evitan el uso de productos de origen animal en el resto de ámbitos de su vida, como el cuero, la lana, la lanolina, la seda… El motivo de ello es que todos estos productos implican la explotación de animales.
Crudívoros: son aquéllos que siguen una alimentación vegetariana en la que se consumen productos crudos, o ligeramente tibios, que no han sido calentados por encima de 46,7 °C (116 °F), y nunca cocidos. Los consumidores de productos crudos argumentan que el cocinar destruye las enzimas y/o porciones de los nutrientes, aunque algunos creen que el cuerpo asimila mejor ciertos alimentos si éstos se encuentran ligeramente tibios y por ende más blandos. Otros activan las enzimas de los alimentos mojándolos en agua antes de consumirlos. Algunos son frutarianos, y otros comen sólo comidas orgánicas.
Macrobióticos: sus adeptos dejan de emplear carne, alimentos procesados, azúcar, miel. En lugar de ello se consume una dieta equilibrada usando granos, verduras, semillas y frutas. La sal de mesa es reemplazada por minerales de vegetales marinos y sal marina. Las especias son reemplazadas por derivados fermentados de granos.
Granivorianos: como su nombre indica, propugnan el consumo de alimentos en grano. Los granivorianos, como los vegetalistas, eliminan de su alimentación la carne y los productos de origen animal.
Lacto-cerelianos: esta tendencia generalmente puede realizarse dentro de prácticas específicas. Por ejemplo, un régimen practicado por los yoguis en la India, que no se ha impuesto en la práctica del yoga en Occidente, propone una alimentación basada principalmente en el uso de productos lácteos y de cereales. El objetivo es el mismo que el del vegetarianismo. La salud, el bienestar y la pureza, pero también la armonización entre el cuerpo y el espíritu.
Frutarismo o frugivismo: esta teoría es respaldada, entre otros, por Arthur Merrheim, que pretende volver a lo que considera la única alimentación natural, la del hombre prehistórico, que según él era vegetariano pero que ignoraba el consumo de las leguminosas y las verduras. Los frutos secos y la fruta fresca tienen una gran importancia: cada día habría que consumir más de 300 g de frutos secos y un kg de fruta fresca. Algunos frutarianos sólo consumen partes de la planta que hallan caídas de ésta, es decir, comen granos, tomates, pepinos, calabazas, pero no consumen patatas o espinacas.
Esteinerianos: se les denomina también biodinámicos, por la biodinámica, ciencia elaborada por el doctor Rudolf Steiner, que se ocupa no solo de la calidad y de la cantidad del producto agrícola, sino sobre todo de regenerar el terreno empobrecido por cultivos continuos, lo que produce que los nutrientes de los alimentos que consumimos sean cada vez más pobres.
Eubióticos: el principio en el que se basa la eubiótica es el de ayudar a los mecanismos digestivos naturales del organismo, combinando correctamente los alimentos y evitando de manera particular asociar alimentos proteicos con carbohidratos. El ejemplo clave de la alimentación española: huevos y patatas.
Semi-vegetariano o seudo vegetariano: come menos carne que el común de la gente.
Pescetariano: persona que no come carnes pero sí pescados.
Herbívoro: herbívoros son los individuos que se alimentan de verduras, más en concreto de hierbas. Los humanos que deciden llevar una dieta sin carne se denominan vegetarianos.
No carnívoro: persona que no come carne. La mayoría de las definiciones no consideran el pescado, pollo o mariscos como carnes, y tampoco las grasas o aceites animales, excipientes o colorantes de origen animal, harinas de huesos, etc. como productos animales.
Cada persona tiene la decisión en sus manos y tambien para cada persona hay una forma de alimentación correspondiente con su forma de ser, pensar y actuar. Como todo en la vida es un proceso y hay que darle su tiempo a cada persona, a unas les cuesta menos que a otras pero eso depende de la convicción que se tenga para hacerlo. Ya sea por amor a los animales, por problemas de salud, por convicciones religiosas o por el despertar de conciencia de que todos merecemos respeto, es una decisión de cada quien.
Fuente: Dentro de Mi/ Heidi/Tipos de Alimentación para Elevar Nuestro Espíritu