Estos son la fuente de energía inmediata del organismo, y aseguran el ahorro proteico, ya que si no hay carbohidratos, serán las proteínas las que aportarán energía, reduciendo sus otras funciones, y cumplen también función de regulación metabólica.
Existen carbohidratos simples, de fácil absorción o monosacáridos, como: la fructuosa o la glucosa, presentes en la miel, el azúcar, y también en muchas frutas y en la leche, que sirven como endulzantes; también están los polisacáridos o carbohidratos complejos, de absorción lenta que el organismo va usando conforme a sus requerimientos, están presentes en las pastas, en el arroz, en los cereales, frutas, legumbres, y verduras, como las patatas o los duraznos. En general contienen bastante almidón.
Los carbohidratos son importantes para el cuerpo humano, aunque debemos evitar algunos alimentos que no son buenos para la salud y contienen mucho carbohidratos como: el azúcar refinado, que son calorías sin contenido en vitaminas, fibras ni minerales, por lo que solo contribuirán al aumento de peso.