Las naranjas son las frutas con mayor cantidad de antioxidantes, con más de 170 sustancias fitoquímicas diferentes, entre ellas, más de 60 flavonoides que han demostrado tener propiedades antiinflamatorias, antitumorales y anticoagulantes.
El consumo de naranjas y mandarinas puede paliar el riesgo de enfermedades cardiovasculares, de padecer obesidad y diabetes.
Incluso si se llega a consumir un cítrico más al día -sobre el máximo normalmente recomendado de cinco piezas de fruta y hortalizas diarias- también contribuiría a disminuir en un 19 por ciento las posibilidades de sufrir un accidente cerebrovascular.